El metabisulfito de sodio (Na2S2O5) tiene como principal aplicación la eliminación del cloro, este último es extremadamente agresivo con las membranas de osmosis y a su vez reacciona también con las cloraminas. Es un excelente agente reductor y la dosificación correcta funciona como reemplazo de los filtros de carbón activado en la adsorción de muchos compuestos clorados.